La importancia de una buena postura no se debe solo a un tema de apariencia física, es el fiel reflejo de nuestra salud. Tiene directa relación con el comportamiento correcto del sistema nervioso, ya que si existe alguna patología a este nivel, la postura se verá comprometida. Muchos usuarios visitan al Quiropráctico en busca de mejorar sus posturas, entendiendo que la alteración que ellos ven, puede a futuro ser un problema mas que estético, sino que un generador de síntomas que pueden entorpecer la vida diaria.
Diversos factores pueden favorecer a una mala postura; tales como la presencia de estrés, la obesidad, el embarazo, desbalances musculares e incluso el calzado.
La presencia de una mala postura a lo largo del tiempo genera cambios en la estructura y función de la columna vertebral, la cual puede perder su alineación normal o alterar su movimiento normal a nivel articular, esto ejerce presión en los nervios que salen entre las vertebras de la columna, hace menos eficiente el sistema y aumenta el gasto energético. Estos nervios controlan todos los sistemas del cuerpo humano, por lo tanto si existe algún tipo de presión sobre ellos, pierden la habilidad de controlar y monitorear el cuerpo y de esta manera se producen alteraciones a nivel articular, muscular e incluso visceral. El Quiropráctico tiene los conocimientos y las destrezas para liberar esta presión sobre las estructuras vertebrales, liberando el sistema nervioso para lograr el óptimo funcionamiento del cuerpo y sus sistemas.
Una mala postura, puede generar dolor en la columna vertebral, dolor que puede tener un comienzo insidioso e instaurarse de forma aguda:
Es por este motivo que es importante considerar un completo chequeo postural Quiropráctico y así mantener un correcto equilibrio corporal.
El Quiropráctico puede identificar el origen de las alteraciones posturales, interviniendo de forma directa o indirecta sobre aquellas estructuras corporales que están generando el la alteración postural y el consecuente malestar. El efecto de estas técnicas puede ser inmediato o lograrse en algunas sesiones después de la primera cita. Lo más evidente es la disminución progresiva o inmediata en la intensidad y frecuencia de los eventos dolorosos que le usuario padece.
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Clínica Raquis